El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió este jueves su informe anual de lucha antidroga y como sucedió en los últimos años volvió a aplazar a Bolivia en su combate contra el tráfico ilícito de estupefacientes. La ausencia de la DEA es identificada como la principal causa para evitar la disminución del delito de narcotráfico.
El informe señala que la capacidad de Bolivia de “identificar, investigar y desmantelar las organizaciones narcotraficantes sigue estando considerablemente disminuida desde la expulsión del personal de la DEA en 2009”.
El informe enviado al Congreso norteamericano menciona que Bolivia y Venezuela “han fracasado manifiestamente en cumplir los compromisos internacionales de control de narcóticos”.
El informe coincide con el escándalo desatado en Bolivia por la captura del ex jefe policial antidroga, Gral. (r) René Sanabria, quien trabajaba en la inteligencia del Gobierno y es ahora procesado en los EE.UU. por narcotráfico.
Esto motivo que la oposición boliviana insista en que el narcotráfico infiltró altas esferas del Estado y Policiales.
El ministro de Gobierno, Sacha Llorentty aseguró que este caso está siendo utilizado por los opositores para pedir el retorno de la DEA, recalcando una vez más que por “dignidad” la agencia norteamericana no volverá al país.
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