
No obstante, cuando una diputada nacional sugiere censurar el acullico durante las sesiones, porque supuestamente adormece los sentidos de los parlamentarios y los confunde; ignorando que esta costumbre, otrora ceremonial, se extendió precisamente porque los españoles entendieron sus virtudes que mejoran el desempeño de las personas y las mantiene en alerta; y que hasta ahora ningún estudio demostró su cualidad de estupefaciente; la denuncia en contra de la Convención de marras deja de parecer tan burda. (Como no puede ser de otra manera La Razón defiente la postura de Choquehuanca, ignorando que han pasado 50 años de la resolución y no sólo los 25 que se dio para ser cumplida. El 80% de los problemas bolivianos nacen en los cultivos de la hoja de coca que causa estragos por su directa e inocultable concomitancia con la cocaína, aspecto que LR, ni siquiera menciona para comprobar cuán comprometido está este medio que fue comprobado por Chávez y puesto a las órdenes del MAS. Qué triste que un diario boliviano esté en la práctica al servicio de la corriente narcotraficante que pretende cambiar la historia. La hoja no es ninguna medicina, es la incitación al vicio)
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agradezco por toda crítica sana sin insultos ni vulgaridades, mejor si contiene ideas y sugerencias