El peligroso narcotraficante boliviano, Marcos Antonio Roca Ali, conocido con el alias “El Presi”, fue detenido en un megaoperativo realizado en Paraguay el pasado sábado.
Roca Alí es un narco que ya fue capturado en Colombia, Estados Unidos y Perú. Su última detención fue el 23 de septiembre de 2010 en la ciudad boliviana de Trinidad, capital del Beni.
El operativo, donde se incautó 1.500 kilos de cocaína, fue ejecutado por el grupo de élite de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y permitió desbaratar la estructura logística dedicada al tráfico internacional de droga en Paraguay. La organización es considerada la más importante, ya que representa el 20 por ciento del total de ingreso de cocaína en Paraguay, vía aérea, según los antidrogas.
El grupo operaba libremente, tanto que trabajaba logísticamente para apoyar a diferentes bandas dedicadas al tráfico de droga.
El jefe que manejaba la estructura logística es el detenido Ezequiel de Souza Gómez (32), quien arrendó el asentamiento indígena de 1.500 ha., ubicado en la localidad de Guabirá, a 35 kilómetros de la Paloma y a 60 kilómetros de Salto del Guairá.
Ahí fueron aprehendidos ayer un total de 19 hombres de diferentes nacionalidades, entre ellos un suboficial de la Policía Nacional. Los mismos se encargaban de recibir los aviones cargados de la mercadería en un puesto de alijo ubicado cerca en la zona.
En el lugar recibían la droga proveniente de Bolivia y Perú; posteriormente, la enviaban al Brasil. Una parte iba a ser destinada a las favelas de la vecina región.
AVIONETAS En el puesto fueron encontradas 5 aeronaves, de las cuales tres tienen matrículas bolivianas, una brasileña y otra adulterada, una motocicleta, 4 lujosos vehículos, 3 pistolas 9 mm, 1 escopeta calibre 36, fusil AK 47 y PA 45.
Las avionetas eran proveídas para el trasladado de la droga destinada a grupos criminales, como al Primer Comando Capital, Comando Vermelho y Primer Comando Catarinense. Funcionaba una pista clandestina.
Los patrones son de la zona de Pedro Juan Caballero, encabezados por importantes jefes narcos brasileños, quienes se encargan de colocar la mercancía, según Luis Rojas, jefe de operaciones de la Senad.
En el extenso lugar, los agentes hallaron precarios campamentos donde guardaban la cocaína. Algunos panes de la droga estaban enterrados en bolsas y bidones.
El ministro de la Senad, Francisco de Vargas, dijo anoche que oficialmente se decomisaron 1.500 kilos de cocaína pura.
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